Sinopsis:
En una escuela de música de New York donde acaba de acometerse un atroz crimen, el presunto asesino es acorralado en un aula. Cuando los agentes de policía irrumpen en el aula se ha esfumado de forma inexplicable. Lincoln Rhyme, el mejor forense del mundo, se enfrenta en esta ocasión a un criminal de extraordinarias habilidades: engañar, escaparse, disfrazarse, desaparecer de las formas más inverosímiles.
Opinión:
La verdad es que se trata de un libro que literalmente he devorado. El estilo del señor Deaver es ágil, ameno y con un sentido del ritmo que pocas veces he visto en otras novelas, no dejando ni un respiro al lector. Puedo asegurar que es imposible leer menos de sesenta páginas de una sentada, y que cuando crees que ya está bien por hoy de seguir las aventuras de Lincoln Rhyme siempre acabas pensando que necesitas leer un par de páginas más.
La trama está llena de giros inesperados, de forma que sorprende al lector cada poco tiempo y hace que aquello que creía que estaba ocurriendo no sea más que un ardid.
El enfrentamiento entre Lincoln y el asesino o asesinos (no voy a desvelar si es uno o varios) representa la lucha entre la ciencia y la ilusión. La ciencia se basa en la observación de los hechos, en el análisis empírico, los hechos son como son y no como nos gustaría que fueran. ¿Pero que pasa cuando lo que observamos no es real, es una ilusión, un engaño?. Pues esas es la principal habilidad del oponente u oponentes. La capacidad de hacer creer a los demás algo que no ha tenido lugar.
Una novela muy recomendable para los que sean amantes del thriller. Puedo asegurar que no decepcionará.
M
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